La carcasa de aluminio fundido a presión, los tornillos de acero inoxidable y unos valores IP e IK elevados son sinónimo de durabilidad de la tecnología. El soporte especial orientable anticorrosivo de acero inoxidable garantiza un montaje sencillo en pared
y en esquinas interiores o exteriores.
El diseño compacto y plano de la carcasa de aluminio permite una integración discreta de los reflectores en diferentes entornos, a la par que el tipo de protección IP65 contribuye de forma adicional a prolongar la durabilidad de los reflectores. El soporte de montaje garantiza una gran flexibilidad: no solo hace posible una fijación sencilla en superficies lisas, sino también en esquinas interiores o exteriores.